Los acontecimientos que solemos recordar son el Nacimiento de Jesús, su Muerte y Resurrección…  

 

Sugiero que no nos quedemos con los hechos históricos.  Tampoco nos quedemos pensando en Jesús, como si estuviese tan separado de nosotros… 

 

Vayamos más allá… Entendamos el propósito de la Vida de Jesús… 

Comprendamos el significado de lo que Él nos vino a enseñar.

 

En realidad la Navidad y la Pascua son celebraciones que tienen que ver con la Vida: Nacer a la Vida y Elegir la Vida…

 

¿Qué es la Vida? Es un camino que ALGUNOS se atreven a recorrer… Y digo ALGUNOS, pues la mayoría cree que vivir es cumplir funciones vitales (nacer, crecer, desarrollarse y morir)…  Eso NO es vivir…

 

La vida es recorrer el sendero a sabiendas de que somos seres portadores de Alma y que tenemos una misión especial en la Tierra (con los demás y con nosotros mismos)

 

Estamos muy acostumbrados a mirar por afuera de nosotros, hacia los costados. Aprendemos lo que la sociedad nos enseña acerca de la vida… y hasta esperamos que la sociedad nos marque el camino…  Desarrollamos el temor a la muerte, como si ésta fuera real.  Nos aferramos a la permanencia en este plano, y vamos acumulando todo aquello que no tiene nada que ver con nuestra esencia…  La sociedad nos enseña que ¨Tener¨ es más importante que ¨Ser¨… Nos desesperamos si perdemos o no alcanzamos algo exterior… Pero parece que no nos desesperamos demasiado si recorremos el sendero y no llegamos a desarrollar nuestro Ser.

 

No nos quedemos con el Nacimiento o la Muerte y Resurrección de Jesús…  Él vino a enseñarnos la Vida. 

 

La vida es un aprendizaje y tiene que ver con desarrollar nuestro Ser. 

 

Empecemos a Vivir. Para eso vinimos.

 

¡Namasté! Stella Maris