La Familia y los afectos demarcan las fronteras.

 

Hace unos días me dirigía a mi trabajo. Estacioné el auto enfrente de la escuela. Al bajar del auto un hombre me saludó con una sonrisa. Sentí una especie de ¨conexión de luz¨ en ese saludo. Él no me conocía y yo tampoco a él, pero ¨su aire de familiaridad¨ me dejó pensando...

Realmente eso sentí: FAMILIARIDAD... pero con alguien que ¨NO era de MI familia...¨

 

Y empecé a pensar en los límites que aprendimos a decretar y que demarcan las fronteras entre lo familiar y lo no familiar... O los seres que pertenecen al grupo de afectos personales y los que no... De alguna manera aprendimos a clasificar a la gente, y dependiendo de esa clasificación, nos relacionamos, casi demarcando límites tal como lo hacemos con nuestro territorio nacional cuando dibujamos las fronteras...

 

¿Fronteras...? Sí... en los afectos también ponemos fronteras... (Como si los afectos se pudieran medir con una regla, y una vez que son entregados a quienes queremos, ya no nos quedarían para los demás...)

 

Mientras cruzaba la calle hasta entrar en la escuela, después de ese saludo ¨familiar¨, seguí pensando mucho: ¿Si no existieran las familias...? Quizás aprenderíamos a conectarnos ¨familiarmente¨ con toda la gente... Al nacer nos acogería cualquier miembro de la sociedad y nos daría todo el amor que necesitamos para crecer... así no haríamos divisiones entre los de afuera y los de adentro... los conocidos y los no conocidos... y a todos les entregaríamos nuestro afecto... sin clasificar a nadie... Una especie de sociedad en la que primaría la ¨unión de almas...¨

 

Cuando yo tendría unos 4 ó 5 años y ¨llegaba tarde¨ para ver una película en la televisión, recuerdo con claridad que le preguntaba a mi hermano (3 años mayor que yo) ¨¿Quiénes son los buenos y quiénes son los malos?...¨ Sólo esa aclaración yo pedía... Una vez que mi hermano me ¨ubicaba en la clasificación¨, yo podía ¨entender¨ la trama de la película... Por lo visto no me interesaba que me resuma el argumento... sólo pedía ¨la clasificación de personajes...¨ 

 

Aprendimos a clasificar... los buenos, los malos... los familiares y los que no lo son... los amigos, los desconocidos... los de acá y los de allá... 

 

¿Se imaginan una sociedad en la que todos fuéramos FAMILIA? No digo que sea obligatorio llevarnos BIEN con todos, porque las conexiones se producen por cuestiones de afinidad... pero al menos, sería interesante empezar a pensar en construir una conexión familiar con quienes no pertenecen a ¨nuestra familia¨... El saludo con una sonrisa a un desconocido, sería un buen comienzo... Y poner afecto en nuestro trato con quienes no tenemos ningún tipo de conexión familiar o amistosa, sería realmente maravilloso. 

 

Les envío abracitos de Luz... 

Stella Maris